Esade Alumni celebra la 1ª edición de los Premios TFM MUA

¿Cuáles son las tendencias y los proyectos más innovadores en el sector del derecho? La iniciativa de los premios TFM MUA reconoce los trabajos más novedosos y con mayor impacto para la comunidad dentro de esta generación de jóvenes.

Este reconocimiento no solamente pone en valor el talento joven, sino que pone en contacto a los recién graduados con toda la comunidad de alumni, promueve el intercambio de conocimiento, premia las ideas de impacto social, y apoya a los estudiantes para que desarrollen todas sus metas profesionales.

Pero premiar los mejores trabajos de final de Máster de Acceso a la Abogacía no solo abre las puertas a los recién graduados a la red para participar y contribuir a su desarrollo, sino que “aumenta el conocimiento mutuo entre antiguos alumnos que comparten las mismas motivaciones y principios, y las posibilidades de networking”, tal y como destaca Patricia Valentí (MBA 02/Promociona 17), directora de Esade Alumni.

Un trabajo en equipo

La idea original nace de la Comisión Young y cuenta con el apoyo del Club Derecho, para sumarse a los Premios de Tesina TGF BBA y a los próximos Premios TFM MsC que tendrán lugar próximamente. Pero este reconocimiento es también un trabajo transversal entre las Juntas Directivas de diversos clubes y Esade, ya que son muchas las personas que colaboran para identificar, celebrar y compartir el talento.

El jurado, responsable de leer los trabajos y realizar la valoración final, ha contado con la participación de diversos los miembros de la Junta del Club Derecho: Rubén Ferrer (Lic&MBL 00), Cristina González (Lic&MD 10), Ariadna Solana (Lic&MD 08/Master in Corp. Finance & Law 11), Berta Santos (Máster Prop. Int. y Soc. Inf 07), Raimon Tagliavini (Lic&MBL 01/MBA 09), Verónica Valls (Máster IT+IP 17), Núria Pons (Lic&MBL 00), Miguel Rovira (DIN 18) y Lorena Sánchez (DIN 09/PMD 15); y de la Comisión Young: Alex Pérez (DIN 20), Joan Basseda (Doble Grado 18), Ariadna Vall (Máster IT+IP 19), Maximiliano Ranftl (Master IT&IP 20).

Basándose en una selección previa coordinada por Marc García Soler, profesor titular del departamento de Derecho de Esade, el jurado escogió los trabajos premiados teniendo en cuenta su impacto en la sociedad y la contribución al progreso empresarial.

Los premiados

Àngela Martí (GBD 19/MUA 20) recibió el premio por su trabajo “Elaboración de un plan de compliance para una empresa de consultoría tecnológica”, en el que desgranó el concepto y los antecedentes del compliance y las diferentes fases para su implementación. Centrada en la elaboración de un plan eficaz para un servicio de consultoría tecnológica, Àngela realizó una valoración de los riesgos inherentes de la empresa, detectando 13 posibles riesgos, y definió hasta 74 controles y recomendaciones necesarias para reducir dichos riesgos, revelando la importancia de planes de detección de delitos sobre las personas jurídicas.

Daniel Garrido (MUA 20), premiado por su trabajo “Smart Contracts según el ordenamiento español”, escogió este tema por su proyección futura, ya que los contratos inteligentes van a impactar a entre el 10 y 15% de los despachos de abogados en los próximos 5 años. Daniel ha analizado si esta figura tiene plena validez legal, estudiando el concepto, las leyes del ordenamiento español a aplicar, los problemas de los contratos alojados en Blockchain, así como si es necesario legislar para dar un encaje completo a esta figura o es suficiente con la autorregulación.

Danae Travé (BGG 19/MUA 20), con su trabajo “La intimidad en el trabajo desde una perspectiva empresarial”, analizó si el derecho a la intimidad de los trabajadores colisiona con la facultad de vigilancia y control empresarial en derechos e intereses. La vigilancia y control empresarial se plantea como un deber, habiendo una yuxtaposición de obligaciones respecto a la protección del derecho a la intimidad. Para Danae, si bien la jurisprudencia ofrece una respuesta en el contexto de colisión, si hay una aproximación no existe una respuesta para cumplir con la triple obligación de proteger la intimidad, investigar el delito y ejercer un control.