La transformación de las organizaciones genera oportunidades profesionales
noviembre 7, 2018 11:40 amLa transformación digital está cambiando las organizaciones. Estos cambios suponen oportunidades para el desarrollo de nuevos perfiles profesionales, al tiempo que nuevas formas de empleo. Además, surgen nuevas oportunidades de negocio y nuevos retos para empresas y sus empleados. Sobre estos aspectos conversaron Isla Ramos (AMP 04), vicepresidenta del Club Innovación ESADE Alumni, exdirectiva de Lenovo y profesional con experiencia en las áreas de la transformación, y Santiago Rodríguez Llorente (EMBA 04), emprendedor con amplia experiencia en la innovación y la transformación y director de crecimiento global de Altran, durante el debate titulado «Carreras en los ámbitos de la innovación y la digitalización», organizado por ESADE Alumni Careers junto con el Club Innovación ESADE Alumni.
Momento actual
El primer tema tratado fue el momento en el que nos encontramos. Isla Ramos describió esa foto como «un mundo donde el mayor proveedor de contenidos del mundo no genera ningún contenido, el mayor proveedor de transporte privado del mundo no posee ningún coche y el mayor proveedor de alojamiento del mundo no posee ningún inmueble. Y eso nos da una foto del mundo en el que vivimos». Además, aseguró que para avanzar hay que hablar de oportunidades y no solo de retos, porque la democratización de la tecnología ha traído cambios para los profesionales y en el mercado laboral. La demanda de profesionales para trabajar en el sector de la tecnología es muy superior a la oferta.
Para explicar lo que está pasando, Santiago Rodríguez Llorente recurrió, por un lado, a la profesora Carlota Pérez, de la Universidad de Cambridge, que habla de las revoluciones tecnológicas que ha habido a lo largo de la historia y de las fases por las que ha pasado cada una de ellas. En la actualidad, nos encontramos inmersos en la quinta revolución. Por otro lado, habló del concepto matemático de los sistemas complejos: el todo es más que la suma de las partes. «La tecnología es gratis, tiene un coste marginal, todo el mundo tiene tecnología. La gente se conecta entre sí, formando un sistema complejo que resulta impredecible. Nuestro mundo interconectado es impredecible». Destacó, además, que lo que estamos viviendo ahora no va a parar, pero está creando muchas oportunidades: «Y eso es muy divertido».
En cuanto a las industrias y sectores que se van a ver afectados, tanto Isla como Santiago dejaron claro que afecta a todos los sectores. Además, Isla Ramos destacó algunas tendencias que se pueden observar en todos ellos: abiertos las 24 horas, exceso de información, transparencia e inmediatez, todo es un servicio y prima la experiencia del cliente, entre otras.
Cómo afecta al negocio y a las personas
No hay duda de que la transformación digital afecta a los negocios y ofrece herramientas para mejorar. Para Isla Ramos, «hay que hablar de transformación de los negocios porque la transformación digital es una parte de la transformación del negocio». Santiago Rodríguez, por su parte, aseguró: «Hay que centrarse en el impacto de lo digital en el negocio, no hay que centrarse en la tecnología». Y habló de que la tecnología ha propiciado que ahora en las empresas se trabaje de manera distinta en tres aspectos: se trabaja de manera colaborativa, hay mayor rapidez en la gestión de los cambios y las empresas son entes abiertos, sus empleados tienen interacciones con otras empresas, proveedores, clientes, etc.
Y es en los puestos de trabajo donde más efecto tiene esa transformación digital porque los puestos de trabajo desaparecen como tal en las organizaciones. La estructura de estas está cambiando mucho y seguirá cambiando. «Debemos dejar de hablar de jobs y comenzar a hablar de skills porque lo que te va a anclar a tu puesto de trabajo son tus capacidades. Tenemos que aprender a trabajar con equipos virtuales, a trabajar por objetivos, etc.», aseguró Isla Ramos.
Santiago Rodríguez habló de una nueva forma de aportar valor a las empresas y a las organizaciones. Para entregar resultados en tiempos cortos, se puede hacer desde dentro de la empresa, liderando equipos transversales y moviendo recursos: «Pero si estás fuera, también puedes ser parte de esto, porque ahora las empresas están más abiertas al concepto del freelance o del experto». La figura del freelance cada vez es más común en las organizaciones y más valorada por las empresas. En este sentido, Isla recordó el aumento del empleo en la llamada gig economy: «Yo lo que vendo son mis skills y las vendo por proyecto y a varios empleadores».
El directivo que busca la transformación
Otro de los temas que se debatió durante el coloquio fue cómo es el directivo que quiere o tiene que hacer frente a la transformación. Isla Ramos destacó que cada organización es un mundo y que no hay una receta que sirva para todos. Sin embargo, sí dejó claro que el directivo debe estar alineado con el negocio, debe ser un líder capaz de conseguir el compromiso de las personas –porque esa transformación se hace de forma transversal a toda la organización– y debe acometer esa transformación desde sus fortalezas.
Santiago Rodríguez Llorente coloca frente al directivo al líder o hacedor de cosas: «Lo que hagas debe aportar valor y reflejarse en la cuenta de resultados». También habló de la transformación personal del ejecutivo: «No puedes transformar una empresa si no transformas antes al ejecutivo». Y para ello invitó a los asistentes a buscar el equilibrio en cuatro aspectos: ámbito intelectual, relaciones personales, tiempo para la salud y el cuidado físico y un tiempo para la espiritualidad.
Además, Santiago aportó tres aprendizajes tras diez años de experiencia de su «yo-empresa». La primera es que no se puede gestionar la incertidumbre, por lo que hay que saber convivir con esa incertidumbre. La segunda es que hay que trabajar con una red de confianza –solo no se puede– y asumir que juntos se crea valor. Y la tercera es generar valor económico, la rutina diaria se basa en generar valor.
Tanto Isla como Santiago expusieron la necesidad de tomarse un tiempo de reflexión y de elaborar un plan estratégico personal, pensar en lo que cada uno quiere ser y hacer y en cuáles son las singularidades de cada persona.
Competencias más destacadas
El último punto que trataron fue las competencias más importantes que deben tener las personas para enfrentarse a la transformación digital. Isla Ramos hizo una lista de las actitudes que cree primordiales y que son aplicables a todos los sectores: capacidad de aprendizaje, capacidad de adaptación, pensamiento proactivo, perspectiva, pasión, planificación y generosidad, entre otras. Santiago Rodríguez Llorente añadió tres más: transparencia, ser capaz de reconocer patrones y la capacidad de hacer cosas.