Resultados de consultores solidarios en las ONG asesoradas

julio 23, 2020 11:19 am

Entrevista con Daniel Ibarz (DGONG 10), director de la Fundación Bayt al-Thaqafa

El principal objetivo de la Fundación Bayt al-Thaqafa es ser un punto de encuentro entre culturas. Un punto de encuentro integrador y que acompañe a aquellas personas que han migrado a nuestro territorio, sobre todo poniendo en valor todo el bagaje social, cultural, académico, religioso que traen con ellos. Daniel Ibarz nos habla de los retos futuros y la colaboración con Esade Alumni Social y destaca que, revisando todas las líneas estratégicas que se definieron hace 4 años gracias al acompañamiento del grupo de consultores solidarios, alrededor del 80% se han logrado y con creces.

-Desde hace más de un año, es también el presidente de RED ACOGE. ¿Qué líneas de trabajo se desarrollan para afrontar la crisis humanitaria/sanitaria por la COVID-19 que estamos viviendo desde ambas entidades? Y ¿qué tendencias tiene identificadas para los próximos años?

La crisis finalmente aflora y acrecienta las vulnerabilidades y evidencia aquellos puntos de nuestro sistema que no funcionan. Por un lado, estamos incidiendo en aquellas nuevas políticas que se están introduciendo y que valoramos muy positivamente (como el IMV, entre otras), pero que olvidan a toda la población en situación administrativa irregular. Las personas que ya están en nuestro territorio han de gozar de la condición de plena ciudadanía (que, entre otras cosas, implica poder percibir prestaciones sociales). Por otro lado, intentamos incidir en una política migratoria que facilite a aquellas personas que quieran venir hacerlo de forma regular. Si no incidimos en estos dos aspectos, la tendencia será la de crear una brecha aún mayor entre la dualidad ciudadanos/no ciudadanos.

 

«El foco y dirección que nos imprimieron fue clave para nuestro cambio. Ahora somos más solidos y hemos más que doblado nuestros servicios a beneficiarios finales»

 

-Hace más de 3 años que participaron en el proyecto Consultores Solidarios. ¿Cuáles son los resultados y aprendizajes del proyecto? ¿Han podido aplicar las recomendaciones aportadas por el equipo?

Parar y reflexionar a día de hoy es un lujo, así como el mero hecho de sentirse acompañado en este tipo de procesos. Y todavía más poder hacerlo gracias a un equipo multidisciplinar, profesional y entusiasmado. Revisando todas las líneas estratégicas que se definieron hace 4 años gracias al acompañamiento del grupo de consultores solidarios, alrededor del 80% se han logrado y con creces. El foco y dirección que nos imprimieron fue clave para nuestro cambio. Ahora somos más sólidos y hemos más que doblado nuestros servicios a beneficiarios finales. Hace 4 años partíamos de una entidad sin estructura, que venía de un seguido de cierres negativos y un presupuesto anual de 700.000 euros y unos 20 trabajadores, 2 sedes y 5 pisos de acogida. A día de hoy, el presupuesto es de 2,2 millones de euros, 67 trabajadores, 22 pisos de acogida, una nueva sede y una estructura que nos ha permitido crecer sin perder el espíritu tan carismático de la entidad.

-¿Qué significó para ustedes la colaboración de los consultores voluntarios de Esade Alumni?

Significó un punto y seguido. Significó poner en valor las fortalezas y la historia de la fundación y saber preservarlas. Asimismo, significó marcarnos un horizonte. Tal vez uno de los grandes errores que cometemos en las instituciones es no saber hacia dónde ir.

-¿Cómo vincularían su propósito como entidad con los Objetivos de Desarrollo Sostenible?

Tres ODS son los más destacados. En primer lugar, el de la reducción de las desigualdades que, como bien sabemos, la actual pandemia está acrecentando especialmente entre las personas en situación administrativa regular e irregular. En segundo lugar, el ODS de las alianzas, que sin lugar a dudas son la principal estrategia para generar un cambio político y social a largo plazo. Y, por último, el de fin de la pobreza.

-¿Miden el impacto de su entidad en la sociedad y, si es así, cómo lo hacen y hacia dónde se dirigen?

No tenemos una metodología desarrollada que mida el impacto en la sociedad, pero tenemos la certeza de que todas las personas que pasan por la fundación (voluntarios, personas que acompañamos, profesionales) no se quedan indiferentes por muchísimos motivos. Gracias al trabajo desempeñado desde el 1974, hemos conseguido una entidad referente para las comunidades y colectivos migrados y para aquellos que valoran la diversidad y la riqueza cultural.

-¿Qué tipo de vinculación debería existir entre el sector social y el empresarial? ¿Cuál cree que es el papel de la empresa a día de hoy? ¿Y el de las entidades sociales?

La empresa tiene un papel fundamental: pasar de una visión donde la empresa busca únicamente el máximo beneficio económico a toda costa a una empresa implicada y comprometida con su entorno y cuyo único objetivo no es el máximo beneficio económico. El impacto en la sociedad que ello puede conllevar, bajo mi punto de vista, es mayor del que nos podemos imaginar a día de hoy. Eso sí, ese proceso implica una revisión profunda de las estructuras empresariales para que las acciones internas y las acciones externas vayan de la mano. Las entidades sociales han de ser la forma de llegar a la población vulnerable, siendo capaces de crear alianzas a largo plazo con las empresas.

 

«Es clave potenciar alianzas estratégicas, de largo recorrido, entre el sector empresarial y el sector no lucrativo. Las ONG somos garantes de la paz social en tiempos convulsos como los que vivimos y necesitamos trabajar en red y de manera colaborativa con todos los agentes sociales, incluida por supuesto la empresa»

 

-¿Qué otros servicios cree que se podrían ofrecer desde Esade Alumni para dar apoyo profesional a las entidades sociales?

Aparte de la asesoría que ofrecéis y de la formación que Esade ofrece, se podrían potenciar alianzas estratégicas, de largo recorrido, entre el sector empresarial y el sector no lucrativo. Las ONG somos garantes de la paz social en tiempos convulsos como los que vivimos y necesitamos trabajar en red y de manera colaborativa con todos los agentes sociales, incluida por supuesto la empresa.

-¿Qué le aporta pertenecer a la comunidad de Esade Alumni?

Sentirse acompañado y disponer todavía de una red de contactos que te permiten crear sinergias y proyectos conjuntos.

-¿Qué les diría a los/as responsables de una entidad social que se esté planteando participar en el proyecto Consultores Solidarios?

Principalmente que, si reconocen un reto u objetivo claro y definido, no desaprovechen la ocasión que brinda el servicio de asesoría de Esade Alumni. Este servicio ofrece sin lugar a dudas la profesionalidad, energía y entusiasmo para iniciar un cambio en vuestra entidad.